A finales de los años veinte Maruja Mallo formó parte del grupo de mujeres que comenzó a mostrar un imaginario diferente, desde una cosmovisión femenina. Ella creía que la tarea del artista era crear una iconografía visionaria que anticipara un futuro armónico para la humanidad y para el mundo. En su obra podemos ver un protomodelo de las preocupaciones feministas, ecológicas, y decoloniales que hoy nos interesan.
Patricia Molins es historiadora del arte y curadora de exposiciones. Es miembro del Departamento de exposiciones del Museo Reina Sofía (Madrid), y curadora de la muestra dedicada a Maruja Mallo que este museo presentará el próximo octubre. Como investigadora se interesa por la búsqueda de un espacio crítico en los límites del arte, estudiando la cultura material y los haceres de las mujeres. Es autora de un ensayo sobre arte y género en España en los años treinta-cincuenta (La heterogeneidad como estrategia de afirmación. La construcción de una mirada femenina antes y después de la Guerra Civil. Desacuerdos, 2012). Recientemente ha curado exposiciones dedicadas a artistas pioneras en la construcción de un imaginario femenino (Delhy Tejero, Museo Patio Herreriano 2024; Maruja Mallo, Museo Reina Sofía 2025), así como un ciclo de muestras con artistas contemporáneas en torno a las colecciones de tejidos en los Museos nacionales españoles (2025-2026) titulado “Memoria, tejidos, museos. Los barrios bajos de la atención”, junto a Selina Blasco.