Fecha
23 de julio de 2021
Este informe plasma los principales avances que se materializaron en Iberoamérica en los últimos años, así como los principales retos que hay que afrontar para que toda la población de Iberoamérica tenga acceso energético.
Durante la presentación, el Director Subregional para el Cono Sur de SEGIB, Alejo Ramírez, destacó que el informe resalta los logros de la región, como el cumplimiento del ODS 17 (Alianzas para lograr los objetivos) que se ve plasmado en el compromiso de organizaciones multilaterales, gobiernos nacionales y locales. Si bien el informe destaca que los porcentajes de acceso a este servicio básico son elevados en toda la región, aún el 2% de la población iberoamericana sigue sin acceso a la electricidad, lo que supone 10 millones de personas. La mayoría de estas personas viven en zonas rurales o aisladas.
Por su parte, el presidente de la Asociación Iberoamericana de Entidades Reguladoras de la Energía (ARIAE), André Pepitone, subrayó la importancia del multilateralismo para alcanzar un futuro más prospero en la región y contribuir a la recuperación económica.
En tal sentido, señaló que, para lograr el acceso universal a la energía, se debe priorizar el alcance a las personas más vulnerables, ir más allá del acceso básico, garantizar el suministro de los servicios públicos, garantizar la fiabilidad del acceso a la energía, sustituir cocinas que utilizan fuentes provenientes de los hidrocarburos por cocinas limpias (cocinado limpio) y, por último, utilizar la innovación como palanca para acelerar el acceso universal a la energía.
Resaltó que estos desafíos se deben afrontar teniendo presentes los principios de universalidad, sustentabilidad ambiental, económica, social y diversidad. Asimismo, los reguladores energéticos hoy tienen un rol de colaboración más estrecho y en alianza con sus gobiernos, lo que facilita tener mayor intercambio de datos detallados y asesoramiento técnico respecto a los mejores modelos económicos para la toma de decisiones.
El informe señala también que hay 70 millones de personas sin acceso a sistemas de cocinado limpios. En América Latina, algo más del 70% de la población utiliza gas licuado de petróleo (GLP) o gas natural para cocinar, siendo solo el 3% la población que usa electricidad. El resto utiliza leña, residuos y otros materiales que originan contaminación y atmósferas insalubres en las viviendas. Si no se modifican las políticas actuales, en el 2030 un 9,2% de la población de Iberoamérica seguirá sin acceso a cocinado limpio, reduciéndose solo un 2,8% respecto el 12% actual, lo que impediría el cumplimiento del ODS 7. A modo de conclusión, el informe destaca que para garantizar el acceso universal a la energía -y cumplir así con el Objetivo de Desarrollo Sostenible 7- la región debe trabajar en llegar a la “última milla”, que es la parte más complicada.
En el desarrollo de la investigación se contó con las contribuciones de más de 27 organizaciones multilaterales, incluidos el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), el Banco Mundial (BM), el Banco de Desarrollo FONPLATA, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), la Organización Latinoamericana de Energía (OLADE) y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), además de municipios y gobiernos de la región, destacando las aportaciones de los presidentes de Argentina, Ecuador y Andorra, además de los gobiernos nacionales de Paraguay y Perú.
El informe se elaboró en el marco de la XXVII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno, bajo el lema “Innovación para el desarrollo sostenible – Objetivo 2030”, donde los presidentes iberoamericanos realizaron la siguiente declaración final: “garantizar el acceso a una energía asequible, segura, sostenible y moderna, es fundamental para erradicar la pobreza, mejorar la calidad de vida de las personas, y alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible en el 2030, sin dejar a nadie atrás”.
SEGIB, ARIAE y MAUE realizaron un profundo informe sobre el ODS 7 en Iberoamérica, identificando los problemas, los desafíos y las soluciones. Además, se incorporan los aportes de los presidentes de Andorra, Argentina y Ecuador, el canciller de Paraguay y los Gobiernos de España y Perú, además de las máximas autoridades del Banco Mundial, BID, CAF, CEPAL, OLADE y FONPLATA, entre otros.
Durante la presentación, el Responsable de Programas del Centro de Formación de AECID en Montevideo, Óscar Muñoz Alcalá, señaló que para la Cooperación Española apoyar esta actividad es de relevancia ya que se encuentra en línea con el V Plan Director y la Agenda 2030, en especial aportando a la generación de alianzas con socios estratégicos para alcanzar el ODS 7 y universalizar el acceso a la energía para toda América Latina y el Caribe.
